Los cambios cerebrales inducidos por el estrés a menudo conducen a la ansiedad o la depresión, pero afortunadamente se ha demostrado que la curcumina revierte algunos de estos cambios. 

La curcumina es un polifenol derivado de la planta especiada de la cúrcuma, que se ha utilizado durante casi 4.000 años para tratar o prevenir diversas enfermedades. 

 Además de revertir los daños causados por el estrés en nuestro cerebro, estimula la formación de nuevas células cerebrales y sus conexiones, estos son dos procesos que pueden prevenir o mitigar los síntomas de la depresión. 

Controlando el estrés a nivel celular

Los investigadores se han dado cuenta de que el estrés "emocional" o "psicológico" tiene un impacto negativo en nuestro cuerpo, no solo en nuestra sensación de bienestar, sino también generando efectos físicamente dañinos.

En estudios con animales, se logró imitar los tipos de estrés crónico e impredecible que las personas experimentan en su vida diaria. Estos estudios mostraron que el estrés produce cambios físicos en los cuerpos de los animales, como el aumento del tamaño y el peso de las glándulas suprarrenales, particularmente las porciones que producen la hormona de respuesta al estrés, cortisol.

Las elevaciones en los niveles de cortisol en la sangre pueden tener efectos nocivos a largo plazo, como el aumento de peso de la grasa abdominal.

A nivel celular, el estrés inhibe nuestros sistemas antioxidantes naturales, promueve el daño oxidativo y daña las estructuras productoras de energía dentro de las mitocondrias, donde se gestiona la energía celular.

Además, los animales estresados ​​desarrollaron déficits cognitivos, de rendimiento y de memoria precisamente de la misma manera que los humanos. El estrés crónico e impredecible afecta negativamente la producción de compuestos protectores del cerebro, esto explicaría los comportamientos mentales alterados observados en respuesta a situaciones estresantes. 

Pero afortunadamente, un nuevo hallazgo encontró que la curcumina revierte estos cambios dañinos en los sistemas físicos del cuerpo. Cuando se administra por vía oral, se ha demostrado que restablece el equilibrio de cortisol y las glándulas suprarrenales a su función normal y normaliza el comportamiento. En base a estos descubrimientos, se realizaron estudios más recientes que muestran que la curcumina además, puede prevenir la muerte de las células cerebrales y promover nuevas conexiones entre las mismas, que se dañan por el estrés crónico. 

Al proteger las estructuras celulares del daño físico, la curcumina puede ayudar a remediar los impactos a largo plazo del estrés, como la ansiedad crónica y la depresión. Es un nuevo enfoque para lidiar con los efectos del estrés crónico que en la actualidad debido a los estilos de vida que lleva nuestra sociedad la mayoría de nosotros se ve afectado. 

La curcumina se puede usar sola o en combinación con medicamentos recetados para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida, siempre recorda que a la hora de realizar una suplementación es importante hacerlo bajo el control de tu médico de cabecera.