La fragilidad es el término médico utilizado para describir la debilidad, la inmovilidad y la pérdida de coordinación que aqueja a los ancianos. La fragilidad y la osteoporosis son las principales causas de las caídas y fracturas óseas que pueden acabar con la vida independiente de las personas mayores.

Los arándanos impactan favorablemente en las células de todo nuestro cuerpo. La ingestión de los polifenoles de este fruto facilita la reparación crítica del ADN necesaria para mantener la integridad celular joven.

Arándanos y nutrientes para el cerebro

A lo largo de los años, numerosos estudios han demostrado que los arándanos respaldan la salud general del cerebro. Los resultados más significativos revelan que pueden reducir muchos de los factores de riesgo de la enfermedad de Alzheimer, como la acumulación de beta amiloide y el estrés oxidativo. 

Cuando las placas de beta amiloide se acumulan en el cerebro, interfieren con la señalización de las neuronas de célula a célula, que se cree que es una de las principales causas del Alzheimer. Esta acumulación comienza a crecer en el hipocampo (la parte del cerebro que almacena la memoria) y, si no se trata, se propaga a otras áreas del cerebro. 

Los arándanos tienen incluso más beneficios para la salud de lo que se creía anteriormente, incluida la capacidad de mejorar la movilidad y reducir el riesgo de caídas que amenazan la vida en los ancianos. Esta es otra de las grandes razones para que incluyas arándanos en tu dieta.