La dopamina es uno de los neurotransmisores involucrados en la sensación de bienestar.

La cocaína, la nicotina, el alcohol, el azúcar, los opioides (y las experiencias emocionales placenteras) aumentan los niveles de dopamina en el cerebro.

Los déficits de dopamina contribuyen a una menor sensación de bienestar. Esto hace que las personas recurran a agentes estimulantes de la dopamina , ya sea azúcar, narcóticos o alcohol.

Esto es particularmente difícil para los fumadores, que son adictos a la liberación leve de dopamina que obtienen al encender un cigarrillo .

La dopamina es producida por células especializadas que mueren con el envejecimiento.Cuando solo queda el 30% de las células productoras de dopamina, se manifiestan los síntomas de la enfermedad de Parkinson. Además si las células productoras de dopamina disminuyen al rededor del 10%, el resultado podría ser la muerte.

Mucho antes de que esto suceda, las personas sienten que su juventud se marchita porque no pueden disfrutar de las mismas sensaciones de placer y bienestar que cuando sus niveles de dopamina eran más altos.

Existen formas comprobadas de bloquear la enzima que descompone la dopamina en el cerebro y ayudar a proteger las células productoras de dopamina contra la neurotoxicidad.

Una solución es estimular la producción de este neurotransmisor.

Otra opción es el uso de  fitoterapia con plantas medicinales utilizadas en Corea y China, la corteza del árbol de corcho de Amur: “Phellodendron amurense”.

Una de las medidas más efectivas para aumentar los niveles de dopamina en forma natural es disminuir la ingesta de alcohol, de azúcar, el consumo de nicotina entre otros factores.

Antes de experimentar con estas sugerencias te recomendamos visitar a un médico que pueda asegurar que estas ingestas sean seguras para vos y tu salud.