Se ha demostrado que aquellos quienes siguen una dieta Mediterránea poseen un incremento de cualidad de vida con una tasa más baja de mortalidad. La dieta mediterránea consiste en una baja ingesta de carne roja y azucares con énfasis en el pescado, vegetales, frutos secos, granos enteros, vino (con consumición moderada) y aceite de oliva. 

El Aceite extra virgen sin refinar, un componente importante de la dieta mediterránea, fue otorgado un significante crédito en la habilidad de la dieta de promover salud, especialmente gracias a su contenido rico en polifenol .

Hoy en día, nuevos descubrimientos sustanciales validan aún más el beneficio del aceite de oliva extra virgen en salud cardiovascular, ósea y cerebral. Varios de estos estudios demostraron que el aceite de oliva extra virgen:

• Reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares (ataque al corazón, infarto o muerte por una causa cardiovascular )

• Reducen el riesgo de la enfermedad de Alzheimer

• Ayuda al descenso en proteínas nocivas y aumento en las beneficiosas

• Reduce el riesgo de la fractura de cadera

•  Aumenta la densidad y concentración mineral ósea incrementada.

• Ayuda a bajar de peso durante dietas

•   Baja presión arterial   Alarga la vida